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Estrategia para la transformación digital del mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas

Las tecnologías digitales están desempeñando un papel destacado y cada vez más complejo en las situaciones de conflicto del siglo XXI, ya que redefinen los entornos y los agentes de conflicto e influyen en ellos, lo que plantea nuevos riesgos para el mantenimiento de la paz y presenta nuevas oportunidades para mejorar la eficacia de las operaciones de paz y aumentar la seguridad y la protección del personal de mantenimiento de la paz.

¿Por qué adoptar una estrategia para la transformación digital del mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas?

Las estrategias del Secretario General en materia de nuevas tecnologías y de datos (EN) sientan las bases para que las operaciones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas definan un camino propio que les permita aprovechar el potencial de las tecnologías digitales y cumplir con más eficacia sus mandatos presentes y futuros.

En su hoja de ruta para la cooperación digital, el Secretario General reconoce de forma específica que:

“Las tecnologías digitales pueden apoyar las actividades de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas en todo el mundo, entre otras cosas, velando por la seguridad y la protección del personal de mantenimiento de la paz”.

La idea de profundizar en las capacidades internas y en la exposición a las nuevas tecnologías es coherente con la iniciativa Acción por el Mantenimiento de la Paz (A4P); las prioridades establecidas en la iniciativa Acción por el Mantenimiento de la Paz Plus (A4P+) (EN) de 2021 hacen hincapié en la necesidad de un mantenimiento de la paz innovador, basado en datos y promovido por la tecnología.

El reconocimiento de la necesidad de adoptar un planteamiento deliberado y sistemático para lograr la transformación digital en las misiones sobre el terreno llevó a los Secretarios Generales Adjuntos del Departamento de Operaciones de Paz (DPO), del Departamento de Apoyo Operacional (DAO) y del Departamento de Estrategias, Políticas y Conformidad de la Gestión (DEPCG) a poner en marcha, en noviembre de 2020, la elaboración de la estrategia para la transformación digital del mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas.  

El objetivo general de la estrategia es permitir que las misiones cumplan sus mandatos con mayor eficacia y mejorar la seguridad y la protección del personal de mantenimiento de la paz, aprovechando para ello el potencial de las tecnologías digitales, al tiempo que se mitigan los riesgos y se coloca al mantenimiento de la paz en una posición que le permita seguir evolucionando en su uso de la tecnología.

Lea la estrategia completa (EN)

Para lograrlo, la estrategia se basa en iniciativas y estrategias específicas tanto anteriores como actuales, en ámbitos tales como la inteligencia para el mantenimiento de la paz, la evaluación del desempeño para la planificación y la adopción de decisiones, la seguridad de la información o la gestión de datos, y aborda retos como la utilización de las tecnologías con fines militares por parte de agentes no estatales, los ciberataques, la información errónea, la desinformación y el discurso de odio, y cuestiones éticas fundamentales relacionadas con el uso de las tecnologías digitales en el mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas. Al mismo tiempo, la estrategia tiene como objetivo aprovechar al máximo el potencial que ofrecen las tecnologías actuales y emergentes, y a tal efecto concibe las tecnologías digitales como un posible habilitador que permite a las operaciones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas lograr una comprensión del entorno de los conflictos basada en el análisis y con visión de futuro, reforzar la seguridad y la protección de su personal y ejecutar los mandatos de forma dinámica y receptiva. Si se quiere preparar al mantenimiento de la paz para el futuro, será preciso abordar cuestiones tanto transversales como culturales y adoptar medidas específicas para apoyar las operaciones de mantenimiento de la paz sobre el terreno. El carácter integral de esta labor permite llegar a la conclusión de que representa, ni más ni menos, una transformación digital del mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas.

 

La estrategia está dirigida a múltiples destinatarios, entre ellos:

  • El personal de las misiones y de la Sede que trabaja en las operaciones de mantenimiento de la paz o las apoya. La estrategia debe proporcionar un apoyo tangible a la hora de implantar, ampliar y gestionar el uso de las tecnologías digitales y de determinar las lagunas que puedan requerir orientación y una dirección clara, prestando especial atención al papel del personal directivo superior en la gestión de la transformación.
  • Los Estados Miembros, incluidos los que aportan contingentes y fuerzas de policía, así como los que facilitan equipos, capacitación y apoyo a la creación de capacidad. La estrategia reconoce que los Estados Miembros son un agente decisivo en materia de seguridad y protección y en la ejecución del mandato, y busca la colaboración y el apoyo de los Estados Miembros para garantizar la igualdad de oportunidades en lo que respecta al acceso y el uso de la tecnología, así como a la aplicación responsable por su parte.
  • El sistema de las Naciones Unidas y los asociados externos de las organizaciones internacionales, las comunidades de investigación y la sociedad civil. La vía del mantenimiento de la paz hacia la transformación digital se reforzará aprendiendo de otros; la estrategia cultivará oportunidades de colaboración práctica y multidisciplinar.

Principios que rigen la estrategia

  • Accesibilidad. De acuerdo con la Estrategia de las Naciones Unidas para la Inclusión de la Discapacidad, y con los boletines y convenciones adoptados en la materia, la implantación, el diseño y el funcionamiento de las tecnologías digitales de la información y las comunicaciones velan por que las personas con discapacidad tengan acceso, en igualdad de condiciones con las demás.
  • Protección de datos y privacidad. Los datos recogidos se gestionan de acuerdo con las normas y reglas de las Naciones Unidas en materia de confidencialidad, clasificación y privacidad, y se utilizan únicamente para la ejecución del mandato.
  • Basada en la demanda. La tecnología empleada por las misiones de mantenimiento de la paz tiene en cuenta su necesidad de soluciones, no la oferta, y se basa en consultas con las misiones de mantenimiento de la paz a lo largo del desarrollo y la aplicación.
  • No causar daño. Las tecnologías digitales en el mantenimiento de la paz dan prioridad a los intereses y necesidades de las personas, en cuanto sujetos y usuarios de las nuevas tecnologías.
  • Con perspectiva de género. El diseño y el uso de la tecnología tienen en cuenta las consideraciones de género, como, por ejemplo, las diferencias en el acceso, la alfabetización y los prejuicios.
  • Centrada en las personas. La tecnología utilizada en el mantenimiento de la paz es sencilla y fácil de usar y permite la accesibilidad de todo el personal de mantenimiento de la paz pertinente.
  • Respetuosa con los derechos humanos. El uso de la tecnología es coherente con el marco jurídico que rige las operaciones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas, en particular con el pleno respeto de las normas y obligaciones en materia de derechos humanos.
  • Inclusión y transparencia. La adopción de tecnología avanzada por parte de las operaciones de mantenimiento de la paz apoya los mandatos de las misiones y se utiliza de manera inclusiva y transparente.
  • Carácter multidisciplinar. La tecnología se basa en la fuerza de la diversidad e incorpora diferentes competencias, experiencias y perspectivas.
  • Alianzas. Las operaciones de mantenimiento de la paz procuran dialogar y colaborar estrechamente con diversos asociados desde un planteamiento de múltiples interesados, que abarca, entre otros, a los Estados Miembros, otras organizaciones internacionales, el sector tecnológico, los institutos de investigación y las organizaciones de la sociedad civil, a fin de aumentar y compartir el conocimiento colectivo y de superar los retos.
  • Expectativas realistas. La tecnología es un elemento facilitador, pero no resolverá ni compensará los retos operacionales o estratégicos fundamentales.
  • Sostenibilidad y escalabilidad. La tecnología utilizada es interoperable con otros sistemas en uso, se basa en logros ya realizados y lecciones aprendidas, es sostenible a lo largo del tiempo, lleva aparejadas medidas de capacitación, transferencia, mantenimiento y continuidad, y es lo suficientemente flexible como para adaptarse e implantarse fácilmente en múltiples misiones para lograr un mayor rendimiento de la inversión.

¿Cómo se elaboró la estrategia?

Los objetivos, resultados y acciones recomendados se establecieron sobre la base de amplias consultas en todas las disciplinas de la Organización, complementadas con aportaciones de fuentes externas. La metodología se basó en más de 100 consultas, un estudio de referencia y cuatro grupos focales, cinco documentos de investigación encargados y cuatro mesas redondas. Además, el contenido de la estrategia se sometió a un proceso de referencia y validación mediante reuniones de un grupo de trabajo interdepartamental y un Equipo Rojo externo, que examinó la pertinencia, viabilidad y sostenibilidad de las recomendaciones propuestas. El sistema de las Naciones Unidas y otros asociados, desde los organismos, fondos y programas hasta los Estados Miembros, las organizaciones internacionales, los investigadores y los constructores de paz de la sociedad civil, aportaron valiosas ideas a partir de sus propios viajes de transformación digital y su uso de herramientas digitales, señalando desafíos comunes y compartiendo buenas prácticas que se han tenido en cuenta al establecer los objetivos, los resultados y las acciones de esta estrategia.