La joven Yuliia y su familia escaparon del baño de sangre que se vivió hace unas semanas en Bucha. Ahora reciben ayuda de la agencia de la ONU para la migración y se están adaptando a su nueva vida de desplazados, como millones de ucranianos que se han visto forzados a abandonar sus hogares desde el comienzo de la guerra.
18 Abr 2022